Se le ha roto el pellejo a mi tambor. Mi guitarra perdió las cuerdas. Se le cayeron los agujeros a mi flauta. Enmohecieron las llaves de mi saxofón. El piano yace fuera, destrozado. Podría hacer música tocando las palmas pero prefiero acariciarte mientras te silbo la más bella de las melodías.

Esto sí que es una bella melodía.
ResponderEliminar