miércoles, 7 de febrero de 2024

La noche ruge...

 

La noche ruge, se escapa entre los dedos y se dispara al exterior... con miedo de alcanzar le eternidad y descubrir que extraño la gloriosa posibilidad de morir...

miércoles, 17 de enero de 2024

El ojo de tu pirata huracán...

 
Me gusta perderme en tus pensamientos,
porque, aunque termine la mar de atormentado,
me gusta ser el ojo de tu pirata huracán...

domingo, 19 de noviembre de 2023

INVOLUCIÓN DE LA ESPECIE

 

1985.- Tu chica y tú en la cama, con las sábanas bien trabajadas, un par de vasos con hielo derretido en la mesilla, la botella de bourbon muerta en el suelo. La chica adormilada sobre tu pecho desnudo mientras agostas otro cigarrito. La habitación con aroma a humo, sudor y sexo, paz…
2023.- Tu chica y tú en la cama, sobre sábanas tristes con sabor a nada. Un vaso en la mesilla, refrescando la dentadura. El brick de leche de soja con vitaminas A+D y quinoa en la otra mesilla. La chica, aún rígida, pegada a tu piel. El contrato del ‘Sí es Sí’ arrugado en el suelo. Nada de fumar, el tabaco mata y amarillea las cortinas. La habitación con aroma a mezcla de sudor solitario y látex. Las pastillas azules, mezcladas con los espidifines, bajo la almohada. Tu muñeca hinchable te observa atenta, con la boca abierta llena de vacío. Tienes ganas de llorar pero no lo haces, eres machote…
Amnistía a bocajarro, una noche más.

miércoles, 8 de noviembre de 2023

Café silente

 

A veces, y digo a veces, en la oscuridad de la noche paseo por mi bujío como si yo ya no fuera. Observo mis muebles callados, llenos de polvo. El cuarto de la radio en silencio, con las arañas columpiándose en sus telas. El lugar donde escribo sin luz, con mis lápices apagados. La cama triste y fría. Demasiados recuerdos huérfanos. Ya mismo todo esto desaparecerá, no quedarán huellas de mi paso, ni siquiera las manchas de sangre de los mosquitos en las paredes. No fue fácil la vida, pero la viví. Amanece café silente, one more time...

jueves, 7 de septiembre de 2023

La mar de emociones...

 

Diecisiete días errante, casi tres mil kms al volante. Calor exagerado, hoteles, grandes comilonas, aire acondicionado, copas... De copiloto un canalla, un tío enorme que, de vez en vez, se emociona ante la belleza de lo simple. Un campo verde, un campo seco, una costa que se duerme, lluvia, tormentas, risas, broncas, broncas risas... Un amañado miércoles de piedras y algas. Un caminar elegante, enchanclado. Una voz, una incertidumbre, un abrazo...
Ya en casa, haciendo las paces con mi abandonada furgo, saboreando el café y la comida de siempre. Deseando volver al mar, a su cierta maresía, a su voz, abrazado a la sonrisa de un mirar...
Quizás lo cuente al micrófono, quizás no.
La mar de emociones..

martes, 29 de agosto de 2023

La soledad del escritor...

 

A veces, bastantes, el escritor se enfrenta a solas a un complicado embarazo. Puede que de salida incluso no sea deseado. Quizás sólo fue un cruce de miradas que germinó en él. Pasan los días, lentamente, y las evidencias crecen. Pese a que su lápiz no para de escribir, no merma, sigue abultando por momentos. Así pasan los días, hasta que llega el momento del parto que, lejos de aliviarle, le hace gritar de dolor. Su obra, desnuda, mojada y escandalosa, yace sobre el papel. Él la mira asustado y triste, está condenado a quererla pese a que no fue deseada...

Lentamente...

 

Pese a que el papel parecía herido, en realidad era el lápiz el que se desangraba, lentamente...

sábado, 8 de julio de 2023

Compartiendo serenidad, una sencilla y bonita historia.

 

He pasado 4 días magníficos en El Palmar cargados de emociones. Compartiendo experiencias con chic@s sord@s y CODA pertenecientes a COMUNICAdos. Hemo radiado con ellos incluso. Por otro lado he vivido la Feria de El Palmar. Hacía años que no pisaba una feria. Estas cosas me han hecho vivir a un ritmo trepidante para mí. Esta tarde necesitaba desconectar y me vine a Valdelagrana. Cuando estaba esperando la puesta se ha sentado a mi lado una chica joven. Acto seguido se ha puesto a darle el pecho a una cría de meses. La cría no se ha quejado para nada y la madre estaba serena, con la mirada perdida al mar, al sol. Al poco de terminar se ha levantado y, tras acomodar a la cría en el cochecito, me ha mirado sonriendo y se ha despedido,
No me he podido reprimir y, tras identificarme, le he dicho:
-Perdona el atrevimiento, vengo de trabajar en El Palmar muy saturado. Estar aquí sentado, en silencio, saboreando la puesta y ver tu serenidad amamantando a tu hija me ha llenado de paz. Gracias.
A lo que ella me ha contestado:
-Gracias a ti, yo también me he sentido muy cómoda. Con todos los bancos que había vacíos decidí sentarme a tu lado porque transmitías seguridad. Ha sido un placer.
Y nos hemos despedido con una sonrisa.
Jamás olvidaré esta puesta de sol. He vivido muchísimas pero jamás con tanta serenidad y belleza. El sol apagándose y una madre alimentando nueva vida.
Con la de años que llevo escribiendo y no soy capaz de describir el momento, pero tampoco podía dejar de contarlo.
Paz, pura paz y armonía.

jueves, 22 de junio de 2023

Donde pongo el ojo, pongo la balada...

 

Desde que tengo uso de la sinrazón me he considerando un cazador de versos. Nunca me gustaron los versos de granja, esos criados sin apenas moverse. Yo soy más de los que persiguen y acechan a los versos silvestres o salvajes. Me gusta observarlos en libertad tras días huelleándolos, cebarlos hasta ganarme su confianza. Cuando ya los tengo encelados, saco mi pistola y apunto tranquilamente, casi con regocijo. Siempre mirando al corazón, para que el disparo sea certero. Una vez abatida mi presa las llevo a casa. Allí las miro cuidadosamente para comprobar que no tienen ninguna letra dañada. Después les hago radio y grafías y, posteriormente, las devuelvo al bosque…