Se
nos va el mes de Juno, un mes de soles y lunas, de principio a fin. Un ciclo lleno de
tristes luces, de inmensas y tormentosas ausencias. Junio, el mes número seis,
el número sois. El mes en que al alba nací, en el que al alba muero. Un
período en el que el ecuador me dio la vida y la vida, me quitó el ecuador. La
diosa Juno romana en la mitología griega es Hera… y como dice el gran Silvio:
La “hera”
esta pariendo un corazón.
No puede más, se muere de dolor,
y hay que acudir
corriendo pues se cae
el porvenir en cualquier selva del mundo,
en cualquier
calle. Debo dejar la casa y el sillón.
La madre vive hasta que muere el sol,
y
hay que quemar el cielo si es preciso,
por vivir, por cualquier hombre del
mundo,
por cualquier casa…