domingo, 2 de mayo de 2010

Sigue ausente tu sonrisa,
sí, ya hace más de un año
y no soporto el daño
ni con ayuda de la brisa.
No sabes cuánto te extraño,
allá el mar mece tus cenizas,
yo aquí sigo, hecho trizas,
sin encontrar abrigaño.
Aquejado de tu ausencia,
con un dolor hecho crónico
que no cura la ciencia.
Hoy es dos de mayo,
más madre que nunca,
una madre que no callo.

2 comentarios:

aro dijo...

No puedo imaginar más bella felicitación...
La he releído entre una sonrisa y una lágrima...

Anónimo dijo...

Una rosa tan bonita como ella.