lunes, 29 de octubre de 2012

Ocaso...

1 comentario:

Imagine dijo...

Bueno.. el pasado está ahí en nuestra memoria, aunque sea a trocitos , a veces , mal hilvanados.
Ni hay que beber para olvidarlo , ni hay que obsesionarse en convertirlo en presente distorsionado .
Es simplemente lo que somos, lo que nos condiciona . Y es un aliado para no repetir errores.
Aprovecho estas horas de paz para recordar aquellos primeros blogs que llamaban bitácoras en los que se contaban los actos cotidianos de la vida sin más interés que la emoción con la que se contaba . Aquellos blogs con posibilidad no sólo de sincerarse sino de recolectar opiniones que nos motivaban a buscar respuestas .
El tiempo los ha disuelto en un narcisismo sobredimensionado y ya no sirven para aprender pues se aprecia en ellos un encogimiento de hombros ante lo que otros opinen.
El ego hinchadito los ha convertido en simples escaparates sin cualidades nutritivas para la mente y el espiritu.
Todo evoluciona,pero cuando algo enamoró nada perdura más que el agradecimiento a lo que fue. ¿ O no?
Pues yo agradezco y agradeceré toda aquella información que me deshacía en perplejidad y que me hacía tomar posiciones a favor o en contra.