sábado, 4 de enero de 2014
...con los zapatos rotos...
De nuevo los vientos desnudan el
camino,
despojándolo de todo, convirtiéndolo en un pedregal.
Y yo, con los zapatos rotos...
La lluvia ya no acaricia, golpea, apenas te deja
abrir los ojos. Y yo, con los zapatos rotos...
despojándolo de todo, convirtiéndolo en un pedregal.
Y yo, con los zapatos rotos...
La lluvia ya no acaricia, golpea, apenas te deja
abrir los ojos. Y yo, con los zapatos rotos...
Suscribirse a:
Entradas (Atom)