miércoles, 21 de diciembre de 2011

Invierno

Y llegó el invierno que anuló mi primavera.
El mismo que cubrió de nieve mi estío y
destrozó los colores de mi largo otoño.
Arribó el invierno, tengo mucho frío.

domingo, 18 de diciembre de 2011

martes, 13 de diciembre de 2011

Pastillitas de colores

Ya mismo Navidad. Que diferente será a la de aquella primera. Ahora los camellos son perseguidos. Los reyes tienen problemas con los yernos y el rey negro ha sido denunciado por un caramelazo. Belén pide la independencia y los pastores se manifiestan por la caída del precio de la leche. Herodes ya no tendría niños que matar con tanta hambre y abortos. El ángel sería un ángel caído. El Espíritu Santo no tendría sentido con la inseminación in vitro y El Niño no estaría en un pesebre sino en el nido de un hospital. No se cantaría “Blanca Navidad” por el cambio climático y por la persecución de los camellos. Y con el paro que hay y su consecuente hambre, seguramente más de uno pensaría en a “dorar” el niño de verdad.

sábado, 10 de diciembre de 2011

R.I.P.

Cristales rotos

Mi cristal está cada vez más roto. Con tanto parche llegará un momento en que no entrará nada de luz. A oscuras quedará mi agonía. Para más inri se me rompió el reloj. ¿Será cuestión de meter más arena?

jueves, 8 de diciembre de 2011

A mi manera


El síndrome del miembro fantasma es la percepción de sensaciones erróneas de un miembro amputado, que todavía está conectado al cuerpo y el cerebro continúa recibiendo mensajes de los nervios que originalmente llevaban los impulsos desde el miembro perdido. Este tipo de sensaciones dolorosas afectan profundamente la calidad de vida y sueño. Este padecimiento puede incluso generar depresión, anorexia y pérdida de peso, así como aislamiento social. Al tratarse de un dolor de origen en el sistema nervioso, el uso de analgésicos convencionales resulta ineficiente, más aún, retrasa el diagnóstico y desgasta al paciente de tal manera que éste llega a convertirse en un verdadero FANTASMA SIN MIEMBRO.

lunes, 5 de diciembre de 2011

domingo, 4 de diciembre de 2011

Maldito 2011

Sí, maldito. ¿Cómo olvidar aquel 27 de enero? ¿O los meses de abril y mayo? ¿Qué decir de junio? Agosto no se quedó detrás. Y este diciembre está destrozándome y aún quedan fechas por terminarlo. Maldito 2011 desde el principio hasta el final.

Desubicado totalmente

Mi letra sin tu música



Condenado, sí, condenado. Condenado a tu ausencia y a las presencias ausentes. Condenado a los recuerdos y a los acuerdos. Condenado, sí. Condenado a tus cadenas y encadenado a tus aromas. Condenado, sí. A tus colores condenado, condenado a mis incoloras noches. Condenado, sí.
Condenado a tu ausente música y a mi insonora canción. Condenado, sí. Condenado a mis letras sin música. Condenado, sí.


viernes, 25 de noviembre de 2011

Quijotesco soy.

Al igual que el amigo Alonso Quijano mi vida ha sido quijotesca. Me dediqué a luchar contra gigantes molinos y toda clase de injusticias. Todo por tratar de conquistar y proteger a mi Dulcinea. Me llevé gran parte de los palos ofrecidos por las circunstancias. Ni él ni yo estábamos locos, aunque ambos leyéramos en demasía. Tampoco nos volvió locos los golpes recibidos. Nos volvió locos la emperatriz de La Mancha. Toda nuestra lucha fue gratuita. Lo que no cuenta la historia es el verdadero final. Yo me quedé con la mancha, Sancho perdió la panza y se hizo amante de Dulcinea. Menos mal que al menos me queda Rocinante.
Fdo.: El caballero de la triste cordura.

Entre demasiados entres

Entre el corazón y la razón,
entre la vida y la muerte,
entre el acá y el más allá.
Entre ilusión e iluso,
entre pasión y pasional,
entre demasiados entres.

Maximum pudor

Rojo de vergüenza y a la vez con la cara blanca.

martes, 15 de noviembre de 2011

Cinco ya

Cinco meses hacen ya que me caí de tu nido, y, aunque el llanto es amargo y me hace naufragar en mis propias lágrimas, son lágrimas estériles ya que ningún pájaro pudo volver jamás al nido del que cayó.
Pelelito es Charlie de nuevo.

jueves, 10 de noviembre de 2011

Lázaro...

La muerte de un amor es como la muerte de una persona amada. Deja la misma aflicción, el mismo vacío, la misma negativa a resignarse a ese vacío. Aun cuando la hayas esperado, causado, deseado por autodefensa o sentido común o necesidad de libertad, cuando llega te sientes inválido. Mutilado. Te parece que te has quedado con un solo ojo, un solo oído, un solo pulmón, un solo brazo, una sola pierna, el cerebro demediado y no cesas de invocar la mitad perdida de ti mismo, aquel o aquella con quien te sentías entero. Al hacerlo no recuerdas siquiera sus culpas, los tormentos que te causó, los sufrimientos que te impuso. La nostalgia te entrega el recuerdo de una persona apreciable, o mejor dicho, extraordinaria, de un tesoro único en el mundo y de nada sirve decirse que eso es una ofensa a la lógica, un insulto a la inteligencia, masoquismo. En el amor la lógica no sirve, la inteligencia no ayuda y el masoquismo alcanza cimas de psiquiatras. Después, poco a poco, se te pasa. Acasosin que seas consciente de ello, la aflicción disminuye, se extingue, el vacío se reduce y la negativa a resignarte a él desaparece. Te das cuenta por fin de que el objeto de tu amor no era una persona apreciable o, mejor dicho, extraordinaria ni un tesoro único en el mundo. Lo sustituyes por otra mitad o supuesta mita de ti mismo y por un determinado periodo de tiempo recuperas tu integridad. Pero en alma queda una cicatriz que la afea, un cardenal negro que la desfigura y comprendes que ya no eres aquel o aquella que eras antes del duelo. Tu energía se ha debilitado, tu curiosidad se ha reducido y tu confianza en el futuro se ha extinguido porque has descubierto que has desperdiciado un trozo importante de existencia que nadie reembolsará. Ésa es la razón por la que, aun cuando un amor esté consumiéndose sin remedio, lo cuidas y te esfuerzas en curarlo. Ésa es la razón por la que aun cuando agonice en estado de coma, intentas retrazar el instante en que exhalará el último suspiro y le suplicas que viva un día más, una hora más, un minuto más. Ésa es la razón por la que, por último, aun cuando deja de respirar, vacilas en enterrarlo o incluso intentas resucitarlo.
¡¡¡Lázaro, levántate y anda!!!

lunes, 7 de noviembre de 2011

jueves, 3 de noviembre de 2011

A veces...

A veces, cuando digo que estoy bien sólo quiero que alguien me mire a los ojos, me abrace fuerte y me diga:
YO SÉ QUE NO.

martes, 1 de noviembre de 2011

Otoño

Llegó el otoño a mi otoñal camino. Cayeron las hojas de mis escritos pero el viento no pudo llevarse los sentimientos plasmados en ellos. Llegan los fríos a Las Asomadillas pero un hálito de tus manos aún calientan las mías. Pasará el otoño y el resto de las estaciones pero yo no emigraré nunca, quedaré aferrado al alféizar de la sonrisa de tus ojos.

lunes, 24 de octubre de 2011

martes, 18 de octubre de 2011

Me encanta navegar

El mar me llama y a mí, me encanta navegar. Mi vida siempre giró en torno al mar. Ya me cansé de ser marinero en tierra y quiero que me lleven al mar. Necesito un mar embravecido que me lleve por el mundo, lejos de esa tierra que tanto me duele. No quiero quedar en el fondo marino, no, quiero seguir buscando un destino sin tanto dolor. Pasear con la acedía y el calamar, que me saluden los pesqueros al pasar. Sí, aunque mi corazón queda prisionero en tierra, el resto de mi yo quiere navegar. Algún día puede que ella en un velero me navegue y un golpe de mar la cara le llegue a salpicar. Trataré que en esas salinas lágrimas no se mezclen ni una parte de mí. Ese es parte de mi sueño, que ella me navegue y yo la mar navegar. La mar me llama y estoy deseando navegar.

sábado, 15 de octubre de 2011

Suma y sigue

Ya han pasado cuatro meses. Cuatro meses de continuas reparaciones. Mi casa va mejorando por momentos pero sigue sin sabor, vacía de hogareños sonidos. Mucho color pero cada vez menos calor. Llegará el momento es que esté bonita, de escaparate, pero los escaparates no tienen vida. Son para mostrar al público con la idea de que cada cual le ponga sus historias. Curiosamente esta casa nunca tuvo historia, o tuvo poquísima. Pasará al futuro conocida como la cárcel triste del presente ausente o como la del ausente presente. Sí, cuatro meses ya. Cuatro meses de silenciosos recuerdos que no son de este mundo. Esta casa huele a pintura, que no a sus pinturas. No huele a champú o detergente, huele a soledad deprimente. Sí, cuatro meses ya, acompañado sólo de vívidas imágenes, cada vez más lejanas en el tiempo.

sábado, 1 de octubre de 2011

Dolor

Me hieren tus silencios,
me lastiman tus oídos,
me hunden tus ojos,
me hielan tus labios,
me pierde tu piel.
Aún así, quisiera navegarte.

viernes, 30 de septiembre de 2011

Me quedé con las ganas

Me quedé con las ganas de saborear caricias de tus sarmentosas manos. Me hubiera encantado poder mimarte,  poder devolverte la dedicación que me diste. Sí, me quedé con las ganas.

jueves, 29 de septiembre de 2011

Malditas puertas

He pasado casi toda mi vida llamando a las puertas de muchos corazones. Todos, o la mayoría, me cerraban las puertas en las narices o ni siquiera se dignaban a abrir para preguntar qué deseaba. Cuando ya, con los nudillos destrozados y encallecidos de tanto aporrear puertas, había desistido de seguir llamando, me encontré un corazón bonito y limpio. Me atreví, sin esperanza, a llamar. Inesperadamente, la puerta se abrió y me invitaron a pasar. Quedé tan maravillado ante la belleza del interior que no oí el portazo de la puerta al cerrarse a mis espaldas. Estaba en la gloria, tanto, que no me di cuenta que en realidad aquello era una celda, la mayor prisión del mundo. El portazo que no oí a mis espaldas era de una puerta que no se volvió a abrir jamás. Ahora es mi celda de castigo de la que no salgo ni para una hora de patio siquiera. Estoy condenando de por vida en esa celda, sin la esperanza de una posible libertad. Una celda que cada vez se hace más pequeña, por lo que casi no puedo levantarme del camastro. Apenas veo la cara del carcelero cuando me traeespaldas. la comida. He escuchado rumores que dicen que, con suerte, en breve me darán el tercer grado con control telemático, esto supondrá que puedo salir de mi encierro pero tutelado. Ya me ha advertido la asistenta social, que si lo consigo, no se me ocurra llamar a más puertas. Le dije que no se preocupara que no sería yo el que llamara a ninguna más. Así que ya sabéis amig@s, si alguna vez os venís abajo porque todos os cierran las puertas en las narices, pensad que peor sería que la cerraran a vuestras espaldas.

lunes, 19 de septiembre de 2011

Dicen los entendidos...

Dicen los entendidos que ya es hora de abandonar el mal de ausencias que arrastro, que me hace demasiado daño. Yo les digo que prefiero tener las paredes de mi nuevo hogar llenas de sus lindos recuerdos a tenerlas desnudas. Si no sufriera o disfrutara de sus ausencias, ¿en qué emplearía mis extensos momentos de soledad? Me dicen los entendidos que las deje ir ya. A una, navegar y a la otra, volar, que me dé libertad. Que el primer paso que debería dar, dicen los entendidos, es quitarles el posesivo "mi". Creo que será un trabajo demasiado duro, imposible de realizar. Le digo yo a los entendidos, que de momento, quitaré el "mi" posesivo y lo cambiaré por la tercera nota musical. Porque eso son ellas, notas musicales, notas que desearía navegaran eternamente por mis arterias o volaran en mi imaginación. Porque esas notas son las que le ponen música a mi esteparia vida y ya sabemos que la música, unas veces es triste y otras alegre, pero sigue siendo música. Les digo yo a los entendidos, que por mucho que me empeñe o insistan, ellas serán siempre
MI MADRE y MI TÚ.

domingo, 18 de septiembre de 2011

Una duda me corroe

Dicen que Dios es Todopoderoso y el hombre, un ser insignificante comparado a Él. Si esto es cierto, ¿por qué el hombre le puso una marcha atrás a los coches que creó y Dios no se la puso a nuestras vidas? ¡MELOXPLIKEN!

jueves, 15 de septiembre de 2011

Mi hada madrina

Paseaba esta mañana mi tristeza por las calles de mi ciudad, de repente, se me acerca una desdentada anciana demandando caridad. Sentí no poder socorrerla pues estaba casi peor que ella y encima, triste y solo. Así se lo hice saber. Ella entonces, me dijo: solo no estas, me tienes a mí. Seguidamente me regaló la más franca y desdentada sonrisa jamás vista. Asombrado, me di cuenta que al final fui yo el socorrido. Al menos hoy, me siento el más afortunado del mundo. Gracias señora. Gracias.

jueves, 25 de agosto de 2011

domingo, 21 de agosto de 2011

Juan Sin Miedo?

Si yo fuera Juan Sin Miedo y además fuera honesto conmigo mismo, debería cambiar mi nombre por el de Miedo Sin Juan.


sábado, 20 de agosto de 2011

viernes, 19 de agosto de 2011

A la venta ya mismo, a primeros de septiembre

Ya mismo a la venta. Una pequeña selección de cositas mías en colaboración de gente de la talla de Salma Hassan, Jorge Leroux, Águeda Ordóñez, Diego Aristizábal, Erwin Dorado, Andrea Favelli, Paola E. Troya y Jorge Real Sierra. Un librillo para leer en 10 minutos y saborear durante años.

lunes, 15 de agosto de 2011

Demasiado tiempo

Demasiado tiempo llevo perdido preparando la maleta. Pero es que no sé si en mi nuevo destino hará frío o calor, ni siquiera sé si debo llevar ropa. Con los recuerdos me pasa igual, no sé cuales escoger, ni siquiera sé si podré conservarlos o me serán prohibidos. Dudas y más dudas sobre mi nuevo destino. ¿Por qué me tengo que mudar, por qué? Puede que en esta ciudad no haya sido feliz pero en ella están las personas que amo y yo no quiero partir. Es posible que en mi nuevo destino incluso me cruce con antiguas amistades o amores, sí, es posible. Mas lo que yo amo está en esta ciudad. ¿Qué zapatos escoger, los de ciudad o unas simples chanclas playeras? Es complicado partir ligero de equipaje. Más complicado aún entender a estas alturas de la vida, o de la muerte, si me dijeron andén 4 o vía 4. Todo es confusión. Siempre inicié mis viajes sin equipaje por esto mismo, mi indecisión al escoger. Estoy acostumbrado a empezar de cero. Creo que esta vez, una vez más, mi equipaje quedará inconcluso encima de una borrosa cama. Ni siquiera llevaré mi agenda, ¿para qué?, alguien me dijo que en esa ciudad no existen ni teléfonos ni correos. Toca partir ya a esa ciudad donde nada más llegar te mueren la voz. Sólo le pido a los dioses un favor, que me mueran también los oídos, que me mueran el corazón, qué me rematen a base de bien cualquier sentido que me pudiera traicionar. Desisto, me iré con lo puesto, que no es poco. Creo que mi maleta merece el descanso mucho más que yo.

martes, 2 de agosto de 2011

Inmenso el mar que nos separa

Inmenso mar el que nos separa. Un mar encrespado, de millones de lágrimas lleno. Un mar habitado por extraños y diabólicos seres rebosando resabio y malas artes. No sé qué haces tú pero yo por  su orilla paseo a todas horas. Al amanecer para otear el horizonte en busca de alguna señal tuya. En los atardeceres, buscando el color del sol que promete que mañana nacerá una nueva esperanza. De tanta pena y malos rollos el mar se convirtió en insalvable océano. Yo, pese a venirme abajo miles de veces, muchas más me digo que merece la pena tu amor y, por muy bravo que esté ese mar, me lanzaré a cruzarlo en una humilde carabela emulando al marino genovés. Sólo una cosa me diferencia de él, él descubrió un nuevo mundo tras dura batalla con el mar. Yo lucharé con una mar mucho más canalla si cabe y no espero encontrar  un mundo nuevo. Mi sueño es encontrar el mundo que perdí, tu mundo, nuestro mundo.

lunes, 18 de julio de 2011

Un estío diferente

Sí, este verano el mar no sonará igual, no se oirá el madrugador grito del pavo real ni las tórtolas arrullarán tu dormitar ni el sol pintará tu piel junto a la mía. No podré observarte mientras nadas desde los escalones de tu querida piscina. No tendré tu cómplice risa en el puerto bajo el sabor de nuestros gelattos ni tu simpático caminar entre ambulantes puestos del  paseo marítimo. No me podré relajar mientras observo cómo lees ensimismada. No podré navegar en tus silencios ni bailar en tu sonrisa. No podré saborear la belleza de un mojito ni tu cara de niña traviesa ante un puñado de cositas buenas. Sí, será muy diferente. O quizás sea aún peor. Quizás ni siquiera sea.