sábado, 13 de marzo de 2010

A ti, ladrón de sentimientos



A ti que me robaste la felicidad, la tranquilidad y la pasión. Sí, a ti. ¿Por qué no me robas también ahora el dolor, la rabia y el frío desencanto? ¿Sabes? hay algo que no me podrás robar nunca y es el ODIO que me regalaste. Ya sabes aquello de:


Lo que se da no se quita.

1 comentario:

aro dijo...

Puede que sea el peor de todos los ladrones... el de los sentimientos!
Se los lleva y jamás los regresa...