domingo, 1 de enero de 2012

Un año para olvidar

Y se fue mi particular "annus horribilis"
en el que perdí el tren en las 4 estaciones,
frío y más frío, frío en todas mis emociones,
y jodidas amapolas con las que eché las bilis.

Ya no me vengáis más con falsas ilusiones,
ni me vendáis que es muy bonito soñar
porque es de tontos como tontos amar,
no me vengáis con ilusorias tentaciones.

No es la miel para la boca del asno, dicen,
pero tampoco merece el pobre jumento
que por goloso en la boca le aticen.

Para terminar, os dejo mi testamento:
que por mucho que me profeticen,
no me someteré a más juramento.


2 comentarios:

Rato Raro dijo...

He entrado por casualidad en tu blog y la verdad es que me gusta, seguro que me vuelvo a pasar por aquí.

No jures en vano...Je,Je

Un abrazo,

Rato Raro

María C dijo...

Sólo la buena literatura es capaz de retratar lo inhumano de lo humano , Sr, Akaputtao .
Esto es una invitación a que siga filosofando barato , porque la materia prima es de lujo y a lo mejor desarrolla el "Gran libro de los Pensamientos para salir de dudas"
Yo se lo he pedido a los Reyes Magos , pero me han enviado un telegrama diciendo qye aún no se ha escrito.
¡ Qué carajotes!..¿ No son Magos?